El CBD es un cannabinoide presente en el cannabis. Si bien se conocen múltiples aplicaciones médicas de esta sustancia, aún quedan aspectos por descubrir. Cada vez hay más evidencia sobre sus beneficios, y el año 2017 fue especialmente destacado en términos de la literatura científica sobre el tema, con muchas incógnitas resueltas y hipótesis confirmadas.

Los estudios sugieren que el consumo de CBD puede tener un efecto relajante, ayudando a conciliar el sueño y, en algunos casos, asistiendo en el proceso de superación de la adicción al THC. Según la normativa de ayuda de la política agraria común de la región, la producción legal de cáñamo está permitida siempre que las variedades de cannabis utilizadas no superen el 0,2% de THC. Todos nuestros productos cumplen con este requisito legal, siendo completamente legales.

De acuerdo con la normativa de régimen de ayuda de la política agraria común de la región, se puede producir cáñamo de forma legal siempre y cuando las variedades de cannabis utilizadas no tengan un porcentaje de tetrahidrocanabinol (THC) mayor al 0.2%.

Ninguno de nuestros productos supera el porcentaje legal permitido, por lo que son productos totalmente legales. 

Los estudios científicos sugieren que el CBD puede ayudar a reducir la inflamación, las náuseas, y tener efectos beneficiosos en una variedad de condiciones, desde el insomnio hasta la esclerosis múltiple. Sin embargo, es importante destacar que se necesita más investigación para comprender completamente su potencial terapéutico.

Algunos usuarios han encontrado que el CBD puede ser útil en el proceso de dejar el THC. Sin embargo, es importante recordar que cada persona es diferente y que el tratamiento de la adicción puede requerir un enfoque integral y personalizado.